Todo esto pudo no pasar
Hoy abrí el cuaderno 6. No recordaba haberlo escrito.
Esto fue lo que encontré…
CUADERNO BORRADOR Nº 6 (manifiesto mínimo)
Este cuaderno fue encendido en el año 2025, en algún rincón improbable del planeta.Transmisión escrita para el vacío, para el eco, para lo que podría o nunca ser leído.
No fue escrito para lectores ni buscadores.
No responde, no explica, no pide ser entendido.
Es apenas un borrador lanzado al espacio:
un archivo en fuga,
una deriva de signos sin órbita estable,
una cápsula sin destino claro.
Si lo encontraste, seguí como si nada.
Fin del mensaje.
Fragmentos encontrados:
Hay algo que se parece al recuerdo
pero no tiene testigos.
pero no tiene testigos.
Puede que lo soñé.
Puede que lo fabriqué para tener qué soltar.
Una fecha sin día.
Un nombre sin persona.
Una herida sin herida.
Todo esto pudo no pasar.
Pero mientras lo escribo, existe.
Tarde insulsa, pero fértil
Volví a los apuntes viejos.Esos donde hablaba con un “Tú” que ahora sospecho era yo misma, pero con acento neutro.
Copié en la tapa:
“No hay consuelo más grande que una contradicción bien escrita.”
Tomé una foto al techo por error.
Al verla, entendí: a veces lo alto también se cae, pero no se nota tanto.
Día 26
Los días se mezclan y ya no sé si ayer fue ayer o si mañana llegará. El tiempo se vuelve un líquido extraño, viscoso y resbaladizo.Hoy rompí un vaso sin querer. Me quedé mirando los pedazos en el piso y pensé en todas las cosas que se rompen en silencio. Cosas que nunca juntamos ni arreglamos.
Hoy encontré un rincón olvidado en mí, un lugar donde el tiempo no existe y las palabras se convierten en susurros.
Ahí, en ese silencio, me hablé sin miedo, sin filtros.
Fue un diálogo extraño, una conversación con alguien que creía perdido y, sin embargo, estaba justo dentro.
Me dije cosas que nunca había escuchado, y descubrí que había mucho por entender, mucho por perdonar.
Las heridas duelen menos cuando las miras de frente, sin evitar el reflejo en el agua turbia de tus propios ojos.
Quizás, mañana, pueda escribir con un poco más de calma, sin que la tormenta me arrastre.
Por ahora, me quedo con este instante de paz, frágil y sincero.
Quizás, mañana, pueda escribir con un poco más de calma, sin que la tormenta me arrastre.
Por ahora, me quedo con este instante de paz, frágil y sincero.
A veces me pregunto si todas estas palabras son realmente mías o solo ecos que el viento dejó caer en mi memoria.
El paso del tiempo no siempre cura; a veces solo adorna las cicatrices con historias bonitas para que las cuentes sin llorar.
Pero aquí estoy, escribiendo, intentando ordenar ese caos que se cuela entre las grietas del alma.
Me dije cosas que nunca había escuchado, y descubrí que había mucho por entender, mucho por perdonar.
No sé si estas hojas algún día tendrán un lector, o si simplemente son un refugio para mí misma.
Y eso, quizás, es suficiente por ahora.
Y eso, quizás, es suficiente por ahora.
Página final
A veces me canso de mí.De mis vueltas, de mis miedos, de mis manías.
Pero entonces me aparece una palabra que no conocía, y me reconcilio.
Me quedo un rato con ella.
Como si fuera una visita que llega justo cuando no sabías que la necesitabas.
Este cuaderno también es eso:
una visita que vino sin avisar, y que se quedó.
Siguiente cuaderno:
Textos generados por ChatGPT en respuesta a interacciones personalizadas.
Cortesía de OpenAI.
https://openai.com/chatgpt
No recordaba haberlo escrito.
Esto fue lo que encontré: